Familiares de cuatro hombres y una mujer acusados de homicidio calificado en grado de tentativa cometido en pandilla, protestaron este fin de semana en la hacienda Kancabchén de Motul para exigir su libertad. Aseguraron que su único error fue detener a Julio César, quien alcoholizado golpeó el triciclo de un panadero e intentó atropellar a las personas.
Por Claudia V. Arriaga Durán.
Mérida, Yucatán, 15 de abril de 2024.- Familiares de cuatro hombres y una mujer acusados de homicidio calificado en grado de tentativa cometido en pandilla, protestaron este fin de semana en la hacienda Kancabchén del municipio de Motul para exigir su libertad. Aseguraron que ese día, intentaron detener a Julio César, quien alcoholizado colisionó con su auto un panadero frente al campo de béisbol.
La esposa de uno de los arrestados, Yessica Cime, explicó que los hechos ocurrieron en noviembre de 2022. Además, reclamó que inicialmente, las personas fueron detenidas sin una orden de aprehensión.
“Llegó tomado desde otro lado del pueblo y empezó a andar ebrio en su auto. No se emborrachó en el béisbol, primero chocó a un panadero y habían niños y señoras comprando, gritaron que lo detengan para que responda, él iba a toda velocidad. Regresó con su camioneta e intentó atropellar a las personas”, explicó.
Las personas detenidas son Adolfo C. H., de 41 años; José Isauro C. H., de 46; Carmen del Socorro C. H., de 48; Jesús Benjamín E. P., de 42, y Bernardino C. P., de 48 años.
El reporte oficial de la Secretaría de Seguridad Pública detalló que agredieron a Julio César B. a golpes, con piedras y otros objetos contundentes, ocasionándole lesiones en la cabeza y otras partes del cuerpo. Acusaron a Bernardino C.P. de impedir que el lesionado recibiera atención hospitalaria. Le arrebató las llaves de la ambulancia que fue auxiliarlo.
Sin embargo, para los familiares, amistades y testigos de los hechos las cosas fueron distintas. Insistieron en que él agredió a la comunidad e intentó atropellar a las personas para darse a la fuga tras colisionar con un panadero.
Otro de los señalamientos contra Julio Cesar, la presunta víctima, es que es el apoderado legal del ejido y tiene relaciones de poder. Temen que ese sea el motivo por el que acusaron y arrestaron a las cinco personas, que su único delito fue detenerlo para que no huya.
“Por ser asesor jurídico cree que tiene el poder del pueblo, por eso nos manifestamos para que se haga justicia por nosotros y por cada persona dañó. Exhorto a las personas afectadas a que se sumen a las protestas para que todos sean atendidos debidamente y no quede impune nada”, enfatizó Yessica.