Milagros, una perrita que vivía en las calles del fraccionamiento Villas de Caucel murió víctima de crueldad animal. Un vecino le arrojó un bloque en la cabeza y le rompió el cráneo.
Por Claudia V. Arriaga Durán.
Mérida, Yucatán, 04 de abril de 2024.- Milagros, una perrita que vivía en las calles del fraccionamiento Villas de Caucel murió víctima de crueldad animal. Un vecino le arrojó un bloque en la cabeza y le rompió el cráneo. El hecho fue reportado a elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), que acudieron a la zona.
Explicaron que la persona sospechosa de asesinar a Milagros ya había envenenado a otros perros de la calle. Incluso, amenazó a una de las vecinas que alimenta a los canes que viven en la calle.
“Ese vecino me pidió que deje de alimentarlos y tenía una coa en la mano. En aquella ocasión me bloqueo el espacio para no darles comida” , comentó una de las vecinas que cuidaba de Milagros y otros perritos de la calle.
Detallaron que la canina era de una camada que nació en la calle, pero era la única que sobrevivió porque los demás fueron asesinados.
Milagros junto con otros perritos era cuidaba por los mismos vecinos del fraccionamiento. La habían esterilizado y esperaban encontrarle un hogar. En lo que eso ocurría era cuidada por las personas.
Ley Rufo aprobada, pero sigue sin entrar en vigor
El 28 de marzo, las y los diputados del Congreso de Yucatán aprobaron la Ley Rufo que aumenta la pena máxima de cárcel para quien cometa actos de crueldad animal a 10 años. Sin embargo, la nueva legislación aún no entra en vigor porque no se ha publicado en el Diario Oficial del Estado de Yucatán.
Otra de las modificaciones es reconocer a los animales como seres sintientes para proteger a los que están en situación de calle, animales ferales, animales de guía y asistencia, e incluso animales silvestres, que sean víctimas de agresiones.
