J.A.A. le cortó una patita con un machete a Negrito por dormir bajo la sombra de un árbol enfrente de su casa en el fraccionamiento de Piedra de Agua, en el municipio de Umán. Un año y medio después fue sentenciado a pasar 10 meses en la cárcel.
Por Claudia V. Arriaga Durán.
Mérida, Yucatán, 04 de agosto de 2025.- Negrito, un perrito malix que fue víctima de crueldad animal el 29 de marzo de 2024, al fin obtuvo justicia. Aquel día, en el municipio de Umán, un hombre de iniciales J.A.A. le cortó una patita con un machete por dormir bajo la sombra de un árbol enfrente de su casa. Casi un año y medio después, el agresor fue sentenciado a 10 meses de prisión y a pagar por sus gastos veterinarios.
J.A.A. fue sentenciado por el delito de crueldad animal agraviado en un juicio abreviado. El responsable se declaró culpable, luego de ver que no había ninguna prueba que justificara sus acciones.
La denuncia fue interpuesta por la fundadora del albergue para perros y gatos, Silvia Cortes. Aunque está satisfecha porque tendrá una pena privativa de su libertad, al igual que para otras personas activistas, este tiempo no es suficiente.
“Antes de la agresión que pasó el 29 de marzo (de 2024), tuvimos que trabajar con la sentencias vigentes porque aún no estaba vigente la mal llamada Ley Rufo. Con el caso de Negrito, la sanción máxima era de tres años, considerando atenuantes y agravantes y tomando en consideración la sanción mínima y máxima, el cálculo dio nueves meses y la Fiscalía aumentó un mes más”, declaró la activista que lucha contra la crueldad animal, Silvia Cortés.
El abogado en derecho de Lexfor, René Ramírez fue quien llevó el caso de Negrito. Detalló que la sentencia se logró porque se comprobó que J.A.A. cuando atacó al perrito, en el fraccionamiento Piedra de Agua, no solo le ocasionó una discapacidad parcial, también le redujo la expectativa de vida.
“Se le estableció que el delito porque el que era responsable es de las vertientes más gravosas, toda vez que de quitarle una patita con machete, tendrá una discapacidad permanente parcial, además que redujo su expectativa de vida”, expuso.
Negrito no hizo nada cuando fue lesionado. Descansaba y se resguardaba del sol cuando le cortó la patita con un machete. Además, el perrito era conocido por las y los vecinos, quienes cuidaban de él.
J.A.A. deberá pagar poco más de 46 mil pesos por gastos veterinarios de Negrito y los honorarios de representación del can. No podrá tener nunca más una mascota, ni podrá acercarse al albergue Evolución Animal A.C., ni a su fundadora Silvia Cortes.
“Seguimos trabajando en casos judicializados y otros que se judicializarán. Todavía falta mucho, pero seguimos construyendo el camino para que estos procesos de animales agredidos puedan ir mejorando. Todo esto sigue dejando precedentes para que en el futuro y presente las autoridades estén más capacitadas y tengan mejor experiencia”, expresó Silvia de Evolución Animal.