Susan Saravia fue víctima de una violación equiparada tumultuaria el 30 de marzo en San Francisco, Campeche. En un primer momento, fue su mamá, Luisa Elizabeth Rodriguez Berzunza, quien levantó la voz por su hija, pero hoy, la joven de 20 años cansada de recibir mensajes de odio por defenderse, pidió justicia y cárcel para sus agresores.
Por Claudia V. Arriaga Durán.
San Francisco, Campeche, 29 de julio de 2025.- Susan Saravia fue víctima de una violación equiparada tumultuaria el 30 de marzo en San Francisco, Campeche. En un primer momento, fue su mamá, Luisa Elizabeth Rodriguez Berzunza, quien levantó la voz por su hija, pero hoy, la joven de 20 años cansada de recibir mensajes de odio por defenderse, pidió justicia y cárcel para sus agresores.
“El hecho de que yo esté aquí hoy, el hecho de que yo no esté llorando frente a una cámara, que me puedan ver sonreír y disfrutar, que puedan ver que estoy con mi familia, con mis amigos, no quiere decir que no estoy en un proceso. Claro que hay días que me duelen, claro que días que no me quiero levantar. Y muchas cosas que cambiaron de mí. Yo desde el día 1 gracias a Dios recibí atención médica y psicológica”
A Susan la violaron presuntamente Yeshua N., Jorge N. y Ángel N. en su propio departamento. El día de la agresión sexual salieron de fiesta y aprovecharon que fueron de after al lugar para atacarla.
La joven denunció en la Fiscalía General del Estado de Campeche (FGECAM) y se inició la carpeta de investigación CI-2-2025-448. El 15 de abril se autorizaron las órdenes de arresto. A cuatro meses, el 10 de julio, únicamente Ángel fue arrestado.
El proceso de recuperación de la joven no ha sido fácil. Acude a terapia psicológica y tiene una red de apoyo en la que sobresale su mamá. Decidió que aunque sí es una víctima de un delito sexual, hará todo para continuar con su vida.
“Es válido como cada uno quiere llevar su proceso. Muchas personas han vivido, han sido víctimas de violaciones. Muchísimas, hay muchísimas víctimas. La gran mayoría no lo hablan, la gran mayoría se callan, la gran mayoría no alzan su voz y es aún peor porque ellas solo se guardan el dolor, no lo hablan. Nadie sabe lo que está pasando, por eso yo decidí hablar, por eso decidí denunciar”, apuntó.
Susan y su madre, Elizabeth aseguraron que las familias de Yeshua N., Jorge N. y Ángel N. tienen puestos de trabajo en el Gobierno del Estado de Campeche, lo que ha dificultado el acceso a la justicia.
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