Por Claudia V. Arriaga Durán.
Mérida, Yucatán, 17 de octubre de 2024.– “Mi único compromiso es buscar el gasto diario para la comida de mis nietos”, expresó, Juan de la Cruz Dzian Simé, un ejidatario de la comisaría de X-Calakoop del municipio de Tinum; que participa en los trabajos de reforestación del Tren Maya.
Los nietos de Juan tienen 2 y 7 años de edad y él tiene 66, es un adulto mayor. De pie a las afueras de la comisaría, vestido con una playera y usando una gorra, relató con tristeza que desde hace tres semanas se detuvo el proyecto.
El dinero para sembrar los árboles lo entregó el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (FONATUR) a la empresa ICA – encargada del Tren Maya; y está a su vez, a los consorcios que contrataron a las y los campesinos.
Son Grupo México, Mundo Botánico y Servicios de Ingeniería y Control Avanzado (SICA), los empleadores directos de la personas ejidatarias. Desde hace tres semanas tuvieron que detener la reforestación porque el grupo ICA dejó de pagarles el servicio.
Preocupado por la situación, ya que no hay empleo dentro de la comunidad, el comisario ejidal, Jeremías Cime se comunicó con FONATUR; quienes le manifestaron que ya habían entregado el recurso a ICA.
“En septiembre, los consorcios dijeron que por problemas de pago con grupo ICA se suspenderá hasta que entre el nuevo gobierno. FONATUR también respondió que ya firmamos un convenio por cinco años, así que no necesitamos que se firme de nuevo”, comentó.
En la reforestación participaron 40 personas ejidatarias, 30 hombres y 10 mujeres. El pago semanal era de 1600 pesos. Les entregaron el equipo necesario, incluso tenían seguridad social.
Para aceptar el proyecto se realizó una asamblea ejidal en la que estuvieron presentes personal del grupo ICA, Fonatur, Tren Maya y los consorcios Grupo México, Mundo Botánico y Servicios de Ingeniería y Control Avanzado (SICA).
