“A ninguna madre le deberían quitar a mi hijo, así como estoy yo hay muchas mujeres viviendo violencia vicaria. Pido ayuda para que mi hijo Pablo regrese conmigo”, comentó Lily Gómez, cuyo hijo fue sustraído por su padre desde abril de 2023. La Alerta Amber fue desactivada, aunque el menor aún no regresa a casa con su madre. Piden justicia.
Por Claudia V. Arriaga Durán.
Mérida, Yucatán, 14 de mayo de 2024.- “A ninguna madre le deberían quitar a mi hijo, así como estoy yo hay muchas mujeres viviendo violencia vicaria. Pido ayuda para que mi hijo Pablo regrese conmigo”, comentó con tristeza Lily Gómez, cuyo hijo fue sustraído por su padre desde abril de 2023.
Pablo Emiliano García Gómez de ocho años de edad fue separado de su madre el 3 de abril de 2023. Ese día fueron a buscarlo su abuela paterna, Dianela Pinto en compañía de su hermana, Julia Pinto, ya que pasaría las vacaciones con la familia de su padre, Pablo García. Desde aquella fecha Lily no ha podido abrazar de nuevo a su hijo y pasó un año – apenas el 5 de mayo- para que activen la Alerta Amber.
Explicó que existía un acuerdo de custodia y pensión alimenticia, mismos que ella respetó. Incluso, aceptó firmar un divorcio voluntario para separarse en buenos términos del papá de su hijo después de ocho años.
Y en abril de 2023, accedió entregar a su hijo, Pablo, para que pasara las vacaciones con la familia de él. Sin embargo, tras avisarle que enfermó, pidió que por favor lo regresaran a casa con ella. La respuesta es que lo trasladaron al municipio de Motul con su papá.
“El papá me respondió que no regresaría a Pablo y que no me preocupara por nada. Me desesperé y empecé a buscar ayuda. Acudí a la Procuraduría de protección de Niñas, Niños y Adolescentes de Yucatán (PRODENNAY) y dijeron que no podía ayudarme”, explicó.
En la búsqueda de ayuda visitó a su abuela y abuelo, quienes le manifestaron que la abuela paterna de Pablo, la señora Dianela, los visitó para comentarles que no regresaría al menor con su madre porque presuntamente lo maltrataba.
Decidió acudir al Juzgado de lo Familiar para interponer una demanda y a la Fiscalía General del Estado (FGE) para denunciar los hechos. “En el juzgado no procede nada la demanda y en la FGE me dijeron que no harían labores de recuperación”, acotó.
Aunque tras la publicación de la Alerta Amber llegaron reportes del paradero del menor, la FGE le anticipó a Lily que no irían por el menor. Le aseguraron que solo activaron la ficha de búsqueda para tener una dirección y enviarle un citatorio al padre de Pablo.
Lily en las acciones de búsqueda de su hijo organizó una protesta este lunes afuera del Palacio de Gobierno de Yucatán. Esa misma tarde la FGE le informó que desactivarían la Alerta Amber porque se presentó el padre del menor con su hijo, pero ella no recuperó a Pablo.
